DOS ASAMBLEAS, DOS PRESIDENTES....Y UNA BARRA BRAVA QUE NO SABÍA POR QUÉ ESTABA ALLÍ

-Recursos judiciales que no prosperaron.
-Dirigentes que no pudieron ingresar al recinto.
-Nuevas órdenes de la Justicia que nadie vió e intimaciones pasadas por debajo de la puerta.
-Dos asambleas para elegir al nuevo presidente de AFA o mantener al anterior.
-Puertas cerradas y luces apagadas en la entrada.
-Dos presidentes electos aunque hay solo un sillón para ocupar.
-Una "barra brava" invitada que no sabía a qué.

 Todo esto y mucho más se vivió en la nueva elección del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino.
Nadie entendía nada. Ninguno de los que se acercaba a la calle Viamonte al 1300 sabía si podría ingresar, ni por qué había tanto alboroto o el motivo del cierre de la calle. Y si le decían a un ciudadano cumún que todo el alboroto era por la nueva reelección de Grondona o por la asunción de otro presidente en AFA, seguramente iba a insultar al aire por tanta molestia causada.
Pero vamos punto por punto de los mencionados.
A esta elección se la había cuestionado, mediante recursos judiciales de inconstitucionalidad contra el estatuto del fútbol argentino, por clubes del interior que se sentían discriminados y no representados a la hora de votar. Dichos amparos fueron desestimados y la elección mantuvo su fecha firme. Para la misma solo había una lista, ya que el intento de una opositora no prosperó por falta de avales.
De esta manera, y citados oportunamente, los dirigentes habilitados para emitir sufragio fueron llegando a Viamonte al 1300 a la hora prevista.
Recordemos que el lunes y martes, en las puertas de AFA, había carteles colocados anunciando un cierre momentáneo por "desinfección". después nos dimos cuenta cual era la "desinfección" realizada allí.
Dijimos que llegaron los dirigentes, pero no todos pudieron entrar. Nos referimos a los habilitados (49) que debían votar. Tres de ellos no ingresaron al recinto: Baldomar, vice de Velez, el representante de Atlético Rafaela y el vice de Independiente. Habían llegado tarde y la seguridad no les abrió las puertas. Igualmente al señor Bugallo, presidente de All Boys, pero que tenía a su segundo en la reunión. Casualmente, quienes no ingresaron iban a votar en blanco ya que propiciaban la nueva lista, que dijimos no prosperó, y se abrió un manto de sospechas sobre lo que seguiría.
A su vez, se presentaron 66 dirigentes de clubes del interior del país que querían votar y, según ellos, tenían amparos judiciales que los habilitaba a hacerlo. Muchos ingresaron al edificio, pero no a la sala donde se realizaría el acto eleccionario.
Los mencionados recursos judiciales nunca fueron vistos por quienes allí estaban, solo algunas fotocopias que poseía Daniel Vila, candidato de los clubes del interior al sillón de Grondona. Claro, al no haber en AFA quien recibiera las notificaciones judiciales por el cierre por "desinfección", fueron pasados por debajo de la puerta u obraban en poder de los oficiales de justicia allí presentes.
Lo cierto es que nadie entendía nada y los 49, perdón, 46 "obsecuentes grondonistas" comenzaron su asamblea y terminaron votando y reeligiendo a Don Julio, por un período más y por votación unánime, al frente de AFA. Además, debieron reponer boletas!!!!!!.
Paralelamente, los disidentes del interior realizaban su asamblea en el hall del edificio, a media luz y solamente con 52 representantes que pudieron ingresar. Esta fue presenciada por escribanos y abogados de los presentes y oficiales de justicia. El resultado, también unánime, dió como nuevo presidente al señor Daniel Vila, titular de Independiente Rivadavia de Mendoza.

                         Vila muestra la notificación de la Justicia en las puertas de AFA

Si nos remitimos a los hechos, hay dos presidentes en AFA (¿no se parece a la CGT pero sin laburantes?)
Uno de hecho (Grondona), según los estatutos de la Asociación del Fútbol Argentino, y otro elegido mediante representantes amparados en recursos judiciales (Vila).
Pero el sillón es uno solo. Seguramente actuará el foro judicial en esto, ya que si existen los recursos de amparo, y emitidos por jueces de la Nación, la asamblea de la AFA no es válida y sí la realizada por los del interior. Desde el otro lado, si fueron desestimados dichos amparos, la asamblea que reeligió a Grondona según los estatutos vigentes es la que tiene validez.
Sí o si, quedó demostrado que la confusión es general y acorde a los tiempos que vivimos en nuestra sociedad. También, es cierto, que esto es un "papelón" internacional de magnitud tal que en otros países ya se ríen del fútbol argentino. Su prestigio cayó muchísimo.

                                   Grondona, nuevamente dueño de la pelota

La conclusión de la mayoría es que Julio Grondona, con sus pro y sus contras, con causas judiciales en su contra o no, seguirá siendo el dueño de la pelota por cuatro años más y cumplirá, al terminar este nuevo período, 36 años al frente del fútbol argentino.
Mucha policía, varios obstáculos, mucha prensa y dirigentes amontonados en la puertas del edificio de la calle Viamonte, pero la nota la dieron una veintena de "barras bravas" de Chacarita que se presentaron en la esquina de Uruguay y Viamonte. En un principio entonaban cánticos propios; después se calmaron como esperando a alguien y preguntándose "qué hacían tan lejos de casa". Eso quedó plasmado cuando uno de los presentes, hablando por su celular, manifestó que "llegaron y esperaban instrucciones". ¿Instrucciones de quién y para qué?. Al rato comenzaron a entonar consignas en favor de Don Julio. ¿Alguno de los que estaban en la asamblea se comunicó con ellos?, porque, por lo visto, estaban como Adan en el día de la madre. ¿Quién los invitó?. ¿Necesitan dinero para terminar su nuevo y coqueto estadio?. Tal vez, por allí, viene la respuesta.
Ah !!, me olvidaba, la famosa "desinfección" en la AFA era para impedir que el día de la re-re-re...reelección de Grondona no hubiese "bichos" o "ratas" que no comparten lo que allí se trata a diario.