Muchas veces vimos mujeres con trajes de novia llegando a una cancha del ascenso junto a su marido o novio para fotografiarse. Sí, pasó en Nueva Chicago, en Velez y en otros más. Pero pocas veces, o casi ninguna, en el fútbol de ascenso, y durante un partido, ocurrió lo que el fin de semana pasado en Perú.
Roberto Dioses, jugador del Cultural Peñarol, acaparó la atención de los presentes cuando finalizó el encuentro. No solamente porque fue la figura de su equipo en el triunfo 3-1 sobre Atlético Satélite sino porque aprovechó la complicidad de sus compañeros y autoridades para pedirle matrimonio a su novia en medio del campo de juego.
Al finalizar, sus compañeros mostraron pancartas que formaban la clásica frase: "¿Quieres casarte conmigo?", destinada a su prometida que estaba entre los hinchas. A los pocos minutos, la mujer pisó el campo de juego y, entre aplausos de la concurrencia, aceptó la propuesta de Roberto Dioses, que la esperaba de rodillas en el centro del campo. Luego llegaron los cánticos generalizados y las felicitaciones de todos, incluso de sus rivales, a quienes le había anotado dos goles.
Muchas veces dijimos que el fútbol de ascenso da para todo y en todo el mundo. Vaya muestra de nuestros dichos y no lo imaginó ni escribió nuestro amigo José Galoppo. esto fue real. ¿Lo pueden imaginar en la cancha de Juventud Unida, de Dock Sud o de Estudiantes?; ¿Los hinchas respetarán a la novia y felicitarán al jugador?. No lo sabemos.
Eso sí, ¿Qué hubiese pasado si la novia se retiraba antes del estadio o sí, simplemente, no iba porque no le gustaba el fútbol?. No busquemos respuestas raras y felicitemos a Roberto por su ocurrencia y su futuro matrimonio. Felicidades.
Adriana Pietrelli
para Ascenso con Estilo
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