UN PUNTO A CADA UNO QUE NO LE SIRVE A NINGUNO

 

TIGRE   1 – 1  ATLANTA

Bajo la lluvia de Victoria, matadores y bohemios empataron un partido que se repartió por igual, con goles de Magnin para los locales y Riquelme para los visitantes.

Es sabido que, cuando se juega con lluvia, la cancha puede volverse pesada o rápida u condicionar el trámite del partido. Y esto fue lo que sucedió en Victoria, ya que el agua caída del cielo condimento y agregó rapidez a un partido que fue repartido entre ambos conjuntos. 

En el comienzo, Tigre presiono más y llevó a que Rago sea la figura bohemia de la tarde, pero el vértigo provocado por el clima le jugó en contra ya que Atlanta pasó a ser más. Pero en el mejor momento bohemio Magnin remató una magistral jugada de Metilli, la figura de hoy, y puso el 1-0 con que Tigre se fue al descanso. 

Cuando todo parecía estar pintado de azulgrana, llegó el momento de quiebre psicológico del partido, cuando Baliño cobró el penal de Rago sobre Metilli que Magnin remató y el propio Rago contuvo. No obstante, Tigre siguió siendo más hasta que, haciendo honor a su familia, Riquelme clavó un tiro libre con maestría poniendo tablas que serían definitivas. 

En resumen, fue un partido de juego rápido donde la principal característica fue que los goles de unos llegaron en el mejor momento de los otros, y donde no se sacaron ventajas ni en el partido ni en la tabla de posiciónes. 

                       José Galoppo

Nota: Las fotos fueron obtenidas de Google.