CLASIFICACIÓN CON UN GOL AGÓNICO
Argentina derrotó 1-0 a Irán, el sábado 21 de junio en el Estadio Mineirao de Belo Horizonte, con un golazo de Lionel Messi a los 46 minutos del segundo tiempo. Los dirigidos por Alejandro Sabella siguen sin mostrar su mejor versión y esta vez se encontraron con un rival que se defendió bien y hasta tuvo chances de gol. El árbitro serbio, MiloradMazic, no cobró un penal de Pablo Zabaleta a Ashkan Dejagah. La “albiceleste” ya está en 8º de final y ante Nigeria buscará quedarse con el primer lugar, el miércoles 25 de junio desde las 13:00 horas, en el “Estadio Beira-Río” de Porto Alegre.
Los partidos de los mundiales siempre han sido difíciles, pero por la calidad de sus jugadores ofensivos se esperaba que Argentina pudiera imponerse con contundencia en el Grupo F. Desafortunadamente, eso no ha sucedido hasta ahora. A pesar de haber llegado a 8º tras dos victorias en igual cantidad de partidos, el nivel de la selección ha dejado mucho que desear. El equipo sufre demasiado en defensa, depende mucho de Messi para generar juego y los rivales terminan siendo más duros de lo que parece. Aunque, el crédito está abierto y a través de los días esta realidad puede ser modificada.
Primero pasó Bosnia Herzegovina, que aunque tuvo pocas jugadas no fue sencillo para la “pulga” y compañía. De hecho, el delantero del Barcelona tuvo que aparecer con uno de sus característicos remates para poner el 2-0 que después fue 2-1.El segundo escollo fue el Irán del portugués Carlos Queiroz, que complicó a los entrenados por Sabella y mereció mejor suerte. Sólo por el buen pié de Messi, quien volvió a hacer de las suyas en el momento justo, y por las atajadas de Sergio Romero hoy se puede decir que la selección está en los 8º de final. El resto del equipo debe acoplarse mejor a Messi, para que éste no sea el depositario de la única opción de pase.
Sabella utilizó el sistema 4,3,3 por sobre el 5,3,2 que se vio en el primer tiempo ante Bosnia, con los ingresos de Fernando Gago y Gonzalo Higuaín por Hugo Campagnaro y Maximiliano Rodríguez respectivamente. Y, aunque Irán fue un equipo que se defendió con creces, mediante su 4,5,1 con Reza Ghoochannejad como único punta, también pudo haber marcado en un par de oportunidades.
El cotejo comenzó con la Argentina teniendo la pelota, como casi toda la tarde. A los tres minutos, un centro de Marcos Rojo desde la izquierda fue a las manos del arquero Alireza Haghighi. Y, en la réplica, Jalal Hosseini no pudo cabecear de la mejor manera un centro que vino producto de un tiro libre.
La selección no encontraba la forma de abrir el marcador e intentaba a través de pelota parada. A los 25´; un tiro de esquina que ejecutó Messi encontró la cabeza de Federico Fernández, quien cabeceó por arriba del travesaño.Ya pasando la media hora de juego, el capitán argentino fue derribado y tuvo un tiro libre, que se fue por arriba del arco. A los 35´, otra pelota parada del 10 encontró el cabezazo de Ezequiel Garay, por arriba del travesaño.
La primera parte se cerró con otro cabezazo de Fernández que se fue desviado. Los dirigidos por Sabella no podían con un Irán que se defendía en extremo y que demostraba ser más duro de lo que se preveía.
El complemento arrancó sin cambios. A los seis minutos, Rojo desbordó bien por la izquierda y lanzó un centro que Agüero no pudo conectar. Mientras el defensor empezaba a ser importante, el “kun” se mostraba errático.
Los asiáticos tuvieron una gran chance para poder convertir, pero ahí fue cuando “chiquito” Romero se hizo grande. Pejman Montazeri tiró un centro desde la derecha y Ghoochannejad le ganó a Fernández, cabeceando al centro del arco y encontrando la mejor respuesta del portero del Mónaco, quien puso el cuerpo y salvó a la Argentina.
A los 12´ se produjo la jugada más polémica del partido, pues Zabaleta lo derribó a Dejagah en el área chica y Mazic no cobró penal. El serbio tampoco pitó tiro de esquina para Irán, ya que la pelota había sido despejada por el defensor del Manchester City.
Mientras tanto, Messi decidió sacarle lustre a su apático partido y a los 14´ encaró como lo suele hacer en el Barcelona, de derecha a izquierda, y remató al lado del palo derecho de Haghighi. El seleccionado seguía sin marcar ante Irán y tanto Agüero como Higuaín no lograban ser los mejores compañeros para Messi. Pero, Sabella no metía cambios.
Irán se defendía bien, pero no renunciaba a
poder marcar. Así fue como a los 41´, Ghoochannejad remató tras un contraataque
y encontró la mejor respuesta de Romero, quien volvió a salvar a la Argentina.
A los 46´, cuando parecía que todo iba a
terminar sin goles, Lavezzi le dio la pelota a Messi. La “pulga” arrancó en
diagonal desde la derecha y remató de zurda al ángulo inferior derecho de
Haghighi, quien pese a estirarse, poco pudo hacer. Tras el 1-0, Sabella metió a
Lucas Biglia, por Di María.
Así se produjo la agónica victoria Argentina,
que por el funcionamiento del equipo durante el partido no mereció. Irán fue un
digno rival y, a pesar de ser defensivo, tuvo chances claras para poder marcar
y un penal que no fue cobrado por Mazic.
Sin dudas, el equipo de Sabella tendrá que entrenar
duro, porque pronto tendrá paradas más difíciles y el hecho de depender de un
solo jugador es un riesgo muy alto.
Por otro lado, hay que decir que el próximo
rival de la Argentina será Nigeria, el miércoles 25 de junio desde las 13:00
horas, en el “Estadio Beira-Río” de Porto Alegre.
Nicolás Souto
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