Nuestro camino recorrido.....

Mi foto
Tres de Febrero, Prov. Buenos Aires, Argentina
Nacimos hace 32 años por la pasión que nos unió con el fútbol de ascenso. Fue un largo camino recorrido donde no todas fueron buenas, pero le hicimos frente a las adversidades y seguimos en el aire. En nuestro espacio vas a encontar a todos los que comparten esta extraña pasión pero no verás jamás a aquellos "personajes" que se creen dueños de instituciones y utilizan métodos antisociales para creerse importantes ni a sus "padrinos", que los usan para determinados fines y luego no saben como manejarlos. Para aquellos que lejos están del "glamour" de la primera división y del dinero de "fútbol para todos"; para aquellos clubes pobres de corazón grande; para los que semana tras semana dejan cosas suyas para seguir sanamente los colores de su alma y para todos los que se identifican con el "viejo fútbol de los sábados"......Sí, para ellos, va dedicado nuestro programa radial y, ahora, nuestro blog. Gracias.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

CUENTO: ENTRE EL ROCK Y EL FÚTBOL QUEMERO

Siempre se habló de la comunión entre el fútbol y el tango. Tal vez en otros tiempos era solamente así. Pero hoy también el rock comparte un lugar en esa conjunción. Este nuevo cuento, así lo refleja.
                                                 El disco que fanatizó a Roque

QUEMERO PÚRPURA (rock and futbol)

Por las calles de Boulogne (o de Caseros, o de cualquier otra ciudad donde juegue de local...) Roque es inconfundible, porque en él se mezclan sus pasiones: Acassuso y Deep Purple. Para él, los nombres de Gillan, Blackmore, Lord, Paice y Glover son tan importantes como los de Pollero, Miguez, Navone, Ruhl, Balzamé y Mazzulli.

"No quiero perder esos dias
cuando todo es solo una neblina
estoy soñando" (letra de Almost Human)


                                    En su lugar de siempre: La hinchada quemera

La relación que Roque tejió entre Suso y Purple arranca por los años ´70. Por aquellos años, vibraba con las canciones del grupo británico que escuchaba en los vinilos de su casa.

"lo tiene todo
fuerza motriz, grandes neumaticos y de todo
lo adoro, lo necesito, lo sangro
es un huracan salvaje" (Highway star)


Y esas vibraciones las trasladaba a la cancha de Acassuso, sobre todo en aquel 1971 en el que el quemero de la mano de Carlos Guillén, salía campeón el 21 de diciembre tras ganarle 3-1 a Central Argentino, luego de 14 puntos, 7 ganados, 2 empatados y 1 perdido.

                           Donde había recitales, estaba Roque con su remera de Suso

"No importa lo que salga de esto
Se que nunca olvidaras
Humo en el agua, fuego en el cielo" (Smoke on the water)


Su fanatismo por Purple lo llevó una vez a casi golpear a un hincha rival (probablemente de San Carlos) que lo bromeó al preguntarle ¿quién era ese grupo? ¿En qué equipo juega?.
Los años pasaron: llegaron Coverdale, Hughes, Turner y Satriani; por su parte Susso volvería al ostracismo de la D. Pero sus pasiones se mantuvieron intactas en Roque.

"Me he estado volviendo loco
Volviendo loco...
He sido maltratado
He sido maltratado
He estado solo..." (Mistreated)

 "Ahora no hay marcha atrás
y te sabes la partitura.
Y ahora estás aprendiendo
qué es que llamen a tu puerta trasera". (Knocking at Your Back Door)


                                    Uno de los momentos felices de Roque

Y así llegamos a 2001, en que Acassuso volvía a la C después de 30 años, y Purple llegaba al país. Y Roque cumplió con su promesa de ir al concierto con la camiseta del quemero puesta y su cabellera (aunque ya menos y con canas) a lo Ian Gillan.

"sigo cantando la misma vieja cancion
como lo hice antes
cuando me dejaste
nunca sabria antes" (I need love)


Hoy, en cada cancha que Acassuso juegue, en alguna parte de la tribuna aparece una figura con una remera de Deep Purple junto a la de Suso  y una cabellera estilo Ian Gillan.

 "no quiero perder esos dias
cuando todo es solo una neblina
estoy soñando
giras en mi cuarto vacio
y una vez mas soy casi humano
casi humano" (Almost human)

                                                                           José Galoppo

No hay comentarios:

Publicar un comentario