EL HOLANDA DE LA C: VILLA DÁLMINE DEL ´75

A lo largo de los años, muchos equipos hicieron historia en el ascenso de nuestro fútbol con campañas memorables. Poco se los recuerda actualmente ya que la vorágine que envuelve al fútbol argentino en general, no nos brinda el tiempo necesario para el recuerdo. Pero aquí lo intentamos hacer. Esta vez es el turno de un equipo que no solo fue campeón en uno de los mejores torneos de la C sino que superó la barrera de los 100 goles a favor en una temporada. Con ustedes, amigos, EL HOLANDA DE LA C.

EL HOLANDA DE LA C

Cuando el sábado 1 de marzo de 1975 Villa Dálmine con dos goles de Oviedo a Argentino de Quilmes en la barranca, nadie se imaginaba que ese día nacía una leyenda del Ascenso.

                                      Villa Dálmine campeón de la C en 1975

Eran once muchachos que aunque vestidos de violeta, tenían una sincronización perfecta solo comparable a la Naranja Mecánica que había deslumbrado un año antes. El director de aquella orquesta era Roberto Rolando, quien supo amalgamar un equipo que tenía una base, con otros jóvenes que llegaban a Mitre y Puccini. Uno de esos jóvenes era Pedro Catalano, un longílineo arquero que era suplente y se ganó el arco. Junto a él, prodigios llamados Pedro Bases, Juan Alberto Martínez, Eduardo Enrique Oviedo y Miguel Ernesto Benítez, eran los encargados de la creación y del gol.
Y si se trata de goles, qué decir de las goleadas a Fénix, al Cadu, a Colegiales, a San Carlos, a Riestra... Aunque también tuvo su punto negro, cuando tras un incidente, lo obligaron a jugar lejos de Campana.
Hay que decir que debió sortear un hueso duro de roer que fue el Porvenir, ya que el conjunto de Gerli lo perseguía (y era visto por muchos como el favorito) con Durich, Larrea, Parchomczuk, Alzogaray, Calderón y otros. En las dos veces que se vieron las caras, hubo una victoria porveriana y un empate. Y llegaron goleadas de 10 tantos, de 7, de 6, de 5, de 4... en la previa no se decía si ganaba o no Dálmine, sino por cuántos goles.

                           Pedro Catalano, joven arquero de aquel equipo

Y el 15 de noviembre a pesar de estar libre, el Viola aprovechó un empate del Porve y le sacó ventaja, y cuando el Porve tuvo fecha libre, el Viola ganó.
Y finalmente llegó el sábado 13 de diciembre, ese día en el Lorenzo Arandilla de Adrogué, Dalmine alistó a: Catalano; Comisso, Quinteros, Morales y Mansilla; Kerle (Oviedo), Nanni y Vázquez; Bases (Sajama), Juan A. Martínez y Miguel Benítez. Frente a ellos, Brown de Adrogué puso a: Olivieri; Raimundo, Cabrera (Orcellet), O. Martínez y Gaito; Romeo, A. García y Magarzo; Perrota, R. Larcamón y Cocciolo. En un partido intenso, el conjunto de Campana ganó 2-0 con dos goles de Benítez y se llevó el título, a pesar de la victoria del Porve ante Armenio en Gerli.

                       Posiciones de la C en el ´75. El ganador recibía 2 puntos

Aqui está, este es el HOLANDA DE LA C:
Juan Alberto Martínez, Carlos Morales, Carlos Vázquez, José Nanni, Miguel Benítez, Horacio Lobos, Angel Comisso, Eduardo Quinteros, Carlos Mansilla, Pedro Bases, Eduardo Oviedo, Pedro Catalano, Rubén Castillo, Roberto Sajama, Juan Carlos Kerle, Daniel Rodríguez, José Velásquez. Mario Staffora, Adalberto Márquez, Juan Carlos Domínguez, Norberto Jendrulek, Jorge Pérez y Orlando Liendro. DT: Subcomsión de Fútbol en el último tramo del torneo. El técnico al comienzo fue Roberto Rolando.
Números: 36 partidos, 28 ganados, 4 empatados, 4 perdidos, 113 goles a favor (récord en la categoría hasta 1978) y 39 goles en contra, obtuvo 60 puntos (83%), casi 3 goles a favor y solo 1 en contra.

                                                  José Galoppo

Posdata: el Porvenir fue segundo a un punto, con 27 ganados, 5 empatados y 4 perdidos que le dieron 59 puntos, 84 goles marcados y 35 recibidos. Y esta es una opinión mía: si hubiera habido un desempate hipotético entre violas y porverianos en 1975, seguro ganaba el Holanda de la C.

Fuentes: Diario "La Auténtica Defensa"; Blog de Historia y Fútbol de José Carluccio; Foto: gentileza Jorge Hugo del Pardo.