HÉROES DEL ASCENSO

Dos jugadores que mucho le brindaron a los equipos que integraron. Uno recordado por sus goles y el campeonato que logró en primera con su gol a "Perico"Perez. El otro, moviendo los hilos de los equipos en que le tocó jugar. Aquí están los "héroes del ascenso" del día de hoy:

LUCIANO MARTÍN FIGUEROA: HÉROE ANÓNIMO

Luciano Martín Figueroa, el Lele para el mundo del fútbol, nació en Córdoba y aunque se inició en San Lorenzo, desarrolló parte de su carrera en el Ascenso (concretamente en San Telmo y en Almagro) y jugando, además, en el fútbol colombiano.
El destino quiso que en 1972 fuera suplente en San Lorenzo (tras estar a préstamo en San Telmo) cuando Scotta se quebró al chocar con Leone en un partido con Estudiantes. El Toto Lorenzo debió recurrir al Lele improvisándolo como número 7. Y salió bien, porque el domingo 17 de diciembre se jugaba en Vélez la final del Nacional con River. Iban 0-0... y en el minuto 100, el Lele clavó un derechazo memorable que batió a Perico Pérez y le dió el bicampeonato al Ciclón. Ese día fue "el día del Lele".
Luego, jugó en Temperley y Unión, y en 1976 pasó a Almagro, donde formó un tandem memorable: Sánchez - Figueroa - Centurión.
Jugó en total 302 partidos y marcó 96 goles.
Aunque para muchos fue un héroe anónimo, que no tuvo el cartel de Telch, Scotta, Ayala y otros, su nombre quedó en la historia. 40 años después de aquel gol, San Lorenzo lo homenajeó en Venado Tuerto, bautizando la peña de esa ciudad con el nombre "Peña Luciano Figueroa"

MARIANO BIONDI: PINCEL GASOLERO

Mariano Biondi fue principalmente un jugador distinto, que supo brillar en una primera B de los años 70 plagada de talentos (Molnar, Chaparrito, Carlovich, Gigliani, Gallardo, Martínez, Indio Gómez, etc.). Brilló al lado de otros grandes como Alejo Escos y Ricardo Bochini.
Tras realizar sus inferiores en Temperley, debutó en 1970. Fue campeón de la B en 1974, y su estilo exquisito y su dulzura con la pelota se complementaban con la sangre y la garra de Mantequilla Veiga y Pigui Magalhaes.
En 1977 pasó a Independiente, y quedó en la historia por ser el que asistió a Bochini - Bertoni en aquella final en que los rojos, con 8 jugadores, enmudecieron la Boutique en Córdoba y salieron campeones.
Luego fue a San Lorenzo y a Tigre, y en Ecuador fue ídolo de la ciudad de Portoviejo.
Y ese estilo artístico y exquisito lo demostró a lo largo de 436 partidos y 81 goles (de los cuales 121 y 25 en Temperley, y 119 y 35 en Ecuador), y lo trasladó en 1995, cuando llevó al Gasolero a la B Metro como técnico tras largos años de penurias.
Su apellido fue Biondi, Mariano el nombre con el que fue bautizado al nacer (22-8-1951 en Adrogué), pero en Temperley fue, es y será, el Cabezón, el artista, el exquisito, el distinto, el del trato dulce con la pelota... el pincel del Gasolero.

                                      José Galoppo