Por la falta de
pago, por parte de la AFA, de la deuda que hay con los clubes, los dirigentes
de la B Nacional decidieron no jugar la fecha de este fin de semana. Las otras
divisionales jugarán sus partidos y se reunirán la semana próxima para decidir
los pasos a seguir.
En la AFA, como sabemos, las cosas no anduvieron bien
desde la llegada de la Comisión Normalizadora y de la decisión de no aumentar,
por parte del Gobierno, el monto del dinero del Fútbol para Todos. Solo habría
incrementos si los clubes se comprometían a poner en orden sus cuentas, en
pagar las deudas que tenían y cosas por el estilo.
Cuando parecía que todo se iba encarrilando, porque se
pagó lo atrasado, se pusieron ciertas condiciones y la pelota comenzó a rodar
en todo el fútbol de ascenso. Se habían acordado ciertos ingresos fijos y la
disminución de gastos que antes tenían los clubes, como los operativos
policiales y los viajes entre otros.
En otras notas mencionamos que no se había llegado a una solución
final sino que era un parche momentáneo y que debían continuar negociando, pero
había muchos que pretendían jugar para poder generar ingresos. Y es lo que
debía ser.
Algunos dirigentes, con más argumentos políticos que
deportivos y buscando llevar agua para su molino sin tener en cuenta al resto,
siguió batallando sin comprender los vientos de cambio que llegaron. Otros, en
cambio, y más allá de lo que recibirían, comenzaron a hacer las cosas bien, de
manera distinta, para solucionar los problemas que tenían.
Muchos bajaron los montos de los contratos, buscaron
nuevos auspiciantes, comenzaron a depurar a sus asociados, todo para funcionar
mejor dentro del nuevo marco que se acercaba.
Pero aún seguía el núcleo duro, que solo espera recibir dinero, y se vislumbraba un nuevo conflicto. Ellos habían avisado que si no se
cumplía con lo que solicitaban el fútbol de ascenso se iba a parar nuevamente.
El pago de la deuda que mantiene la AFA con los clubes,
los costos de los operativos policiales en los estadios y los traslados a los
partidos son los principales puntos a solucionar. Los mismos que al principio
de la temporada. Pero nada mencionaron los que llevaron la voz cantante sobre
las deudas que ellos tienen.
Al parecer todo sigue igual. Los dirigentes de la B Nacional decidieron que no se juegue la próxima fecha de su categoría. Además, los representantes y presidentes de los equipos de otras categorías del ascenso convocaron a una reunión el martes 27 de septiembre para tratar todos estos temas y analizar si la medida de fuerza se extiende a todo el ascenso.
Ferreiro también se expresó en su cuenta de una red social
y escribió: “Hoy decidimos defender a cada uno de nuestros clubes de la BN. Es a
favor del cumplimiento de los acuerdos. No nos quedó otra opción”.
Pero no todos los dirigentes estuvieron de acuerdo con lo
que según Ferreiro decidieron de manera unánime. Tal vez tendría que haber
dicho “por mayoría” porque algunos hicieron públicas sus disidencias. Uno de
los casos fue el del presidente de Instituto de Córdoba. La directiva del club
de Alta Córdoba manifestó estar en contra del paro decretado en la B Nacional, no de los reclamos.
El presidente de Instituto, Gastón Defagot, comentó su
pensamiento: “Le manifestamos a todos en la mesa de la B Nacional que no estamos de
acuerdo con la posición tomada”, y agregó que “si no jugamos tampoco nos
ingresa dinero, y lo necesitamos”. Una posición bastante razonable que
contrasta con la política de Ferreiro y otros.
Alfredo Nicolás Armiento
Nota: Las imágenes fueron obtenidas de Google.
No hay comentarios:
Publicar un comentario