Cuatro barra bravas heridos fue el saldo de
un violento tiroteo entre las facciones de la supuesta hinchada de Dock Sud, el club histórico del Ascenso, que festejó su
centenario el jueves por la noche en su estadio. Sigue habiendo inadaptados sociales que creen que algo les pertenece y solo son delincuentes. No tenían ningún derecho de empañarles la fiesta a los verdaderos hinchas y socios del club.
El hecho ocurrió
luego del festejo, cuando las facciones de Los Homeros, Las Casitas y
Las Torres (o los monoblocks) se cruzaron en la cancha, a oscuras, y comenzaron una
violenta batalla con balacera incluída.
Dos de los
heridos, de 16 y 19 años, pelean por su vida en el Hospital Fiorito, de
Avellaneda. Uno fue identificado como Tuni García, y el otro como Ayrton. En dicho hospital también fueron atendidos otros
barras que participaron de los disturbios.
Tuni García (con camiseta de Dock Sud en la foto) fue uno
de los barras de Los Homeros baleados durante el centenario. El otro grave, Ayrton, pertenece a la
facción Las Torres o los Monoblocks, como también suelen llamarlos.
También se sabe
que el barra de Dock Sud que arrancó con los disparos es hermano del
que había ingresado armado al vestuario hace quince días.
La gran pregunta que cabe es si los dirigentes van a
seguir protegiendo a estos delincuentes y permitiendo su ingreso al estadio. Si
lo hacen, no entendieron nada sobre lo que piden los verdaderos hinchas y los
que queremos el fútbol. Una decena de inadaptados sociales no pueden empañar la
merecida y gran fiesta de miles de verdaderos simpatizantes del “Docke”. Y eso
que se habían reunido con el intendente de Avellaneda para evitar algunos
problemas; varios de los violentos le fueron de utilidad a la actual gestión
municipal.
Sea como fuere, amigo lector, saque sus conclusiones. Lo
que no queremos más son estos hechos.
Oscar Ariel Gullotta
para Ascenso con Estilo
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