El vicepresidente
de Nueva Chicago, Daniel Ferreiro, aseguró que el Nacional B “no va a
tratar la Superliga hasta
febrero o marzo” próximo, en referencia al proyecto que busca revolucionar
el fútbol argentino.
“Somos el Nacional B y no vamos a tratar la
Superliga hasta febrero o marzo del año que viene. No vamos a votar una
superquiebra en nuestros clubes“, sostuvo Ferreiro a las puertas del hotel Sheraton, donde
participó de las jornadas con los enviados de FIFA y Conmebol por el cambio de
estatuto de AFA.
Si bien confió en un acuerdo por la reforma estatuto, donde
los clubes del ascenso y del interior se verían levemente favorecidos, sobre la
creación de la Superliga manifestó que “para los 23 clubes de la categoría no
es prioritario la Superliga, no queda en claro qué beneficios nos trae y
la distribución de ganancias no es lo que necesitan los clubes de la B
Nacional”.
Ferreiro agregó que “Institucionalmente no tuvimos una sola
reunión con dirigentes para tratar este tema”, y apuntó directamente a los clubes de Primera División diciendo que “quieren todo para ellos sin fijarse en las
necesidades de los demás”.
Dio a entender que primero el Ascenso quiere tener un “presidente elegido democráticamente”
para febrero o marzo y luego se sentarían a hablar sobre el otro tema.
Más claro, imposible. Así le marcó la cancha a los
dirigentes de la máxima categoría, sobre todo a los clubes llamados grandes.
En conclusión, la Superliga, esa supuesta
revolución en nuestro fútbol y que fue propuesta y bancada por muchos
dirigentes y por la que el Gobierno, incluso, apostó algunas fichas y trabajó
con distintos organismos para su creación, corre riesgo de entrar en un letargo
del que nadie sabe cuándo saldrá.
Fuente: DyN. Foto de archivo.
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